GÉNESIS, PREMIOS FARÁNDULA
Hace muchos, muchos años, en una Fraga muy lejana…
Éramos más jovenes, más delgad@s, más inocentes…más de todo, vamos.
Por ser, éramos tan atrevidos que montamos un grupo de teatro y como era un principio, lo llamamos Génesis. Ya ves tú, tanto incrédulo con un nombre tan bíblico.
Hicimos «treato» durante unos años, y lo que el talento no daba, lo suplía el empeño y la constancia. Nuestra caja de luces era eso: una caja con enchufes y clavijas, lejos del ordenador y el montaje de Ernesto, el «gurú» técnico del grupo actual.
Nos pateábamos la ribera con el «850» de Paco (Tejera), nuestro padre espiritual y el impulsor del grupo desde el inicio. De su mano vimos «Yerma» de Nuria Espert en Zaragoza,(luego llegó la de Pili Agustín y aun hoy pienso que nunca debió quedarse en Fraga una actriz con su talento)
Éramos tan chulos que nos montamos hasta una entrega de premios: los Farándula. No recuerdo cuantas ediciones se hicieron, pocas, como breve pero intensa fue la vida del grupo, pero fueron un fiestorro por todo lo alto.
Ahí, parados en aquella noche mágica está lo «So» Antoniet, el mejor y más sufrido apuntador que jamás tuvo el grupo (se recuerda el día que tiró el libreto y dijo «au va, home, au va, aisó nos pot aguantá»).
lo Maurisio, que un mal día cogió la autopista hacia el cielo.
Margallonet…(cuantas risas, cuantas canciones, Pepe, cuantas…)
Sergio y Javier Ballestar que también se fueron a ver como estaba lo del teatro por el otro mundo.
Jacki, guapo entre los guapos, que estará triunfando entre los ángeles, si al final resulta que tienen sexo…
Y otros muchos que ni peinábamos canas, ni llevábamos barba, ni gafas, ni nada que no fuera ganas de pasarlo bien.
Esa noche hubo algún fotógrafo que nos dejó ahí, congelados para siempre. No se sí fue Claudio Agustin, Jose Mª Latorre, o ambos, u otro, ¡que más da!.
El caso es que alguien hizo fotos y gracias a ello hoy las puedo compartir, para recordar como comenzó esta aventura que ahora reverdece otra vez y en la que vuelven / volvemos a estar algunos de los de entonces.
¡Hay que joderse! se me han empañado las gafas, será de la humedad ambiental, o de un inminente resfriado, el caso es que cuando más miro las fotos, más empañadas están, ya te digo.
Pd: Por cierto, que guapa es la chica de las gafotas. Una monada, si señor. ¡A que me caso con ella!